Pobre niña solitaria, que te cierras al amor.
No te abres para nadie, solo para ese cabrón.
Que supo con palabras atrapar tu corazón.
Para luego rebozarlo y usarte de concubina.
Para solo momentos darte y pasar de tu vida.
Para tener que aguantarle cuernos, plantes y desdichas.
Pobre niña solitaria, que te cierras en coraza.
Haces ver que eres fuerte, pero tu ternura te delata.
Sientes tanto y está encerrado, que por ti amores pasan.
Para luego destrozarlos por solo pensar en el bastardo.
Ese que no te deja sentir, porque te tiene de esclava.
Ese que nunca encontraras en el cuerpo de quien te ama.
Pobre niña solitaria, que tus ojos tristes gritaban.
Que te hace falta compaña, y que te aterra tu casa fría.
Que le falta el calor de una familia enraizada.
Para sentirte segura, para que llenen tu casa.
Para que tengas lo que todos, una familia amada.
Para que sea propia y tuya, para que seas arropada.
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