jueves, 28 de mayo de 2009

cuento budista 6


CUENTO BUDISTA 6

Andaba meditando el Maestro, cando encontró sé con en aprendiz a ser algo... y después de preguntarse (pues no se acordaba) por que coño vivía el chavalote en su casa?
Al verle apesadumbrado le pregunto?
-- Que es lo que te pasa? Si eres funcionario y vives de invitado.
-- Nada maestro, me preocupa un conocido... que al auto proclamarse "puto juguete roto". Cambio de actitud y se convirtió en persona déspota y desconfiada... con actitud defensiva e hiriente sin ser atacada.
Maestro como puedo ayudarla.

En maestro, vio una escolopendra (ciempiés) campando por entre los matojos... Con el pie estuvo jugando y enrabietando al bicho hasta que, con un palo le dio certero golpe, suficiente como para herir pero no matar. Quedando el insecto panzarriba.
-- Intenta poner en posición al ciempiés... Le dijo el maestro al aprendiz y este como siempre obedeciendo.
El bicho al acercar su mano el joven, con los dos aguijones que tiene en la parte de atrás dio le tremendo picotazo al inconsciente dejándole la mano con dolor e hinchazón.
Inmediatamente después, le hizo meter la otra mano entre matorrales, con el mismo resultado que con el enrabietado insecto anterior.

Con las dos manos en descomunal tamaño, cual hombre de arena con mazas pero con un dolor insoportable. El maestro le comenzó a desvelar el enigma de la lección.

* El ser humano como cualquier animal, si se siente herido ataca... sin importarle quien ha sido el atacante.
* Solo los humanos con mal fondo atacan por atacar si te encuentran en el camino, como hizo el segundo insecto.
* Solo las malas personas, no destierran el odio por lo que son infelices, haciendo mas daño a quien creen más indefensos.
* Solo el ser humano hace daño con palabras en proporción a la confianza a la persona herida ( o "las confianzas dan asco").
* Los insectos se supone irracionales, pero la persona que refieres no merece tu piedad. Pues hace daño por maldad y no por haber estado herida.
* Y yo he aprendido (dijo el viejo) que eres alérgico al veneno de Escolopendra.... Llevándole así al hospital
Para un moco verde y sanguinolento por su maldad... y yo creyendo que esta herido y resulto ser serpiente satánica con su manzana incluida.

3 comentarios:

  1. Angel, tus historias budistas, son del todo reflexivas, y aleccionadoras, pero anda mi niño que el maestro podria enseñar con más dulzura.
    Lo bueno es que por suerte, hay gente que por más mal que la hayan tratado , no puede generar odio hacia los demás y no se rebota, porque si no esto seria la selva. Hey que conste que estoy con el maestro.
    Un petonet mi querido amigo.

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  2. Juasss, buenísimo este cuento budista, gran moraleja la que encierra. Y la fotografía, bordada¡¡ jajaja

    Un saludote¡¡

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  3. Sólo el hombre como única especie animal prepotente, malintencionado e hiriente....cuanta verdad¡¡¡¡ toda la verdad en tu cuento, que no es cuento desde luego, es la más trite realidad...
    Abrazo bien fraterno

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